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EMOTIVA DESPEDIDA PARA LA PRIMERA BOMBERA QUE INTEGRÓ LA GUARDIA PERMANENTE

En un acto lleno de nostalgia, reconocimientos y aplausos, autoridades y personal del Benemérito Cuerpo de Bomberos de la República de Panamá (BCBRP) despiden con honores a la capitán Omayra De Los Ríos, la primera mujer en formar parte de la Guardia Permanente, quien se jubila después de 25 años de servicio.
El acto de reconocimiento cerró una jornada en la que un grupo de 12 bomberas, dirigidas por la capitán De Los Ríos, se encargó del turno en la Estación Ricardo Arango, una iniciativa enmarcada en el Día Internacional de la Mujer.
Después de transferir el mando de la Estación al capitán Oliver Mendoza, De Los Ríos recibió los honores de despedida en un acto encabezado por el Cnel. Abdiel A. Solís Pérez, director general del BCBRP, y la Cnel, Matilde Torres, subdirectora general.
Estos incluyeron un pergamino de reconocimiento por sus años de servicios, una estatuilla y presentes de su jefe y compañeros de trabajo.

La capitán Omaira De Los Ríos entró como voluntaria al BCBRP cuando tenía 30 años y 10 años después, en 1996, entra a la Guardia Permanente. Sus primeras funciones fueron como radio operadora.

Al hacer uso de la palabra, la capitán De Los Ríos agradeció a Dios por haberle permitido cumplir 25 años de servicio y quienes la ayudaron y enseñaron a ser una buena bombera.

Instó a las mujeres a luchar por aquello que quieren, en especial, a aquellas a las que les gustaría ser bomberas.

El Cnel. Solís Pérez elogió la carrera desarrollada por la capitán De Los Ríos, quien se retira como jefa Nacional de Operaciones de Radio.

“Tu nombre quedó escrito en la historia del Benemérito. Eres la primera mujer en formar parte de la Guardia Permanente. No solo construiste tu historia, sino que le abriste las puertas a muchas mujeres valiosas, comprometidas, valientes y perseverantes igual a ti, que aportan al crecimiento de la institución que hoy dirijo”, le dijo.

Finalmente, la capitán De Los Ríos recibió el “chorro de despedida”, un verdadero chapuzón que disfrutó y compartió con sus compañeras, muchas de las cuales le llaman “mi mentora”.

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