UN BOMBERO, UN HÉROE ANÓNIMO
A lo largo de la historia, los bomberos han sido los héroes anónimos que enfrentan el peligro con valentía y determinación, arriesgando sus vidas para salvar a otros y proteger a la comunidad.
En cada incendio, rescate y desastre, estos profesionales de la emergencia demuestran un coraje excepcional, a menudo poniendo su propia seguridad en segundo plano frente al sufrimiento y las necesidades de quienes requieren ayuda.
Las historias heroicas de bomberos, cargadas de sacrificio, trabajo en equipo y resistencia, son un testimonio de su incansable dedicación y compromiso.
Estas narrativas no solo revelan su capacidad para enfrentar situaciones extremas, sino también su humanidad, reflejada en el apoyo mutuo y la esperanza que brindan a quienes más lo necesitan.
La mujer en la ventana
Uno de estos, es el Sgto. Primero Fidel De Gracia, de la Dirección de Operaciones de Extinción Búsqueda y Rescate (DOEXBURE)
quien en sus años de servicio tiene incontables anécdotas de como ayudó a salvar vidas y propiedades; especialmente tiene dos historias que han dejado huellas en él.
Recuerda vívidamente que recibieron una llamada a las 11:00 pm aproximadamente, informando que había un apartamento emanando humo.
Relata que a la llegada al lugar, en las investigaciones realizadas les informaron que en la vivienda se encontraba a una dama atrapada, al subir la puerta estaba totalmente cerrada, al realizar la entrada forzada encontraron que el inmueble en un 70% se encontraba en llamas.
Recalcó que prioridad al hacer las labores de extinción, es el rescate de las personas, lo que prima ante cualquier otra situación.
Por lo que se dispusieron a la búsqueda de la fémina, la cual, en lugares del apartamento, los cuales no había sido alcanzados por las llamas, no se encontraba, llamaban indicando que eran los bomberos, sin recibir respuesta, lo que hacía que el escenario se tornara más tenso.
Al final la encontraron en la ventana intentando saltar, cuenta que con todo el equipamiento que tenían lograron extraerla de la ventana y llevarla a un lugar a salvo, preservando su vida.
La niña inconsciente y la señora
De igual forma, narra con especial emotividad que laborando en la Est. Darío Vallarino, un sábado en la tarde, fueron informados de un incendio estructural en Obarrio, al llegar observaban las llamas saliendo por las ventanas, de un piso 8 del P.H.
Recuerda que el encargado de la emergencia era el Capitán Elvis Córdoba, el cual los puso al tanto de que había una persona por fuera del edificio pidiendo ayuda, con sus manos, en medio del abundante humo.
Manifiesta que al ver este panorama, cambian la operación que tenían trazada realizar de extinción, por la de rescate.
Ventilaron el lugar y accedieron al área donde se encontraba la señora y al llegar observaron que en el piso se encontraba una niña de aproximadamente 9 años inconsciente. Agrega que tomo a la niña en sus brazos, la cubrió con la chaqueta del traje de extinción para disponerse a salir.
La dama en su desesperación le preguntaba que como iban a salir, le explicó que se arrodillara y se agachara lo más que pudiera, que aferrara a la vasta del pantalón, que no se soltara, que el le iba a sujetar de un brazo y la ayudaría a salir, mientras continuaba con la niña en brazos.
Procedieron a salir en la fase de evacuación, lograron llegar a la escalera y en ese momento subía el equipo de relevo, le pasó la niña a los mismos y la llevaron rápidamente a la ambulancia, lo que permitió que tanto la niña, como la señora, se salvaran.
Los bomberos son mucho más que profesionales de la emergencia; son verdaderos guardianes de la vida y la esperanza. Con valentía, sacrificio y un profundo sentido del deber, continúan siendo pilares fundamentales de la seguridad y el bienestar de nuestras comunidades.
Sus historias de heroísmo nos recuerdan la importancia de la solidaridad, el coraje y la entrega incondicional, cualidades que hacen de estos hombres y mujeres, no solo salvadores, sino héroes en todo el sentido de la palabra.
yw